Los enunciados bimembres son aquellos que están compuestas por las dos
principales partes de una oración. Dichas partes son el sujeto y el predicado.
El sujeto es quien ejecuta la acción y el predicado es la acción.
Cada uno de estos grupos de palabras o sintagmas contienen su propio
núcleo y diversos modificadores. En el caso del sujeto es un sustantivo y en el
del predicado es un verbo. El sujeto puede ser tácito o sobreentendido o puede
ser visible, tal como podrá verse en los ejemplos que serán citados.
En el lenguaje cotidiano siempre se procura la mayor sencillez y
claridad, sin embargo, también suelen usarse enunciados unimembres como, por
ejemplo: ¡Hurra! o Hay mucho ruido.
Tipos de enunciados
bimembres
Casi la gran parte de los enunciados que existen son bimembres. Por esta
razón se establece entre ellas una subdivisión con el fin de ser agrupadas de
una manera más útil y comprensible.
Un primer grupo se le conoce como bimembres adverbiales y son todas
aquellas que están conformadas por dos miembros que no son verbos. Su primer
miembro siempre es nominal y se le denomina soporte. Su segundo miembro puede
ser adjetival, adverbial, nominal o sencillamente puede ser un complemento.
El otro grupo de los enunciados bimembres son las más frecuentes. Son,
en términos más simples, todas aquellas constituidas por el sujeto, tácito o
expreso, y el verbo conjugado que concuerdan en número y género.
Es de aclarar que aún suele utilizarse la clasificación tradicional de
oración simple y oración compuesta, lo cual no significa que no sea válida.
Clasificarlas en unimembres y bimembres, y a su vez estas últimas en dos
subgrupos, es una forma más precisa que facilita la comprensión en la enseñanza
del idioma.
Ejemplos de enunciados bimembres
- Los
peces viven en el agua - Las
muchachas caminaron todo un día sin descansar - La
luna iluminaba el callejón - La
bicicleta de José Luis es muy liviana - El
doctor le recomendó reposo - La
señora está preparando una sopa de pollo - Los
invitados estaban borrachos - Hilda,
muy afligida, rezó toda la noche - Rafael
es un experto repostero - El
Bayern goleó al Barcelona - Vicente
todavía no se ha comunicado por teléfono - El
barco zarpó hacia Europa - El
día está lluvioso - Su
hermana es verdaderamente muy bella - El
profesor no explica bien las ecuaciones de segundo grado - ¿Por
cuánto tiempo durará la pandemia? - Quien
se quema con leche, llora cuando ve una vaca - Mañana
será otro día - Les
agradezco a todos su colaboración - Clara
oyó ruidos extraños en el patio - La
selección de fútbol, muy cerca del triunfo - Inundaciones
en Valencia, evacuadas muchas familias que perdieron sus casas - Cura
contra el Alzheimer, un extraordinario avance de la ciencia médica - Los medios
pocas veces dicen toda la verdad - Espera
un poco, un poquito más - El precio
de la carne de res volvió a subir - Maradona
fue hospitalizado una vez más - El
pozo de la historia es una novela apasionante - Las
calles de San Lorenzo me recuerdan a mis antepasados - España
es un país de muchas mujeres bellas
Elementos que conforman los
enunciados bimembres
Las estructuras que conforman los enunciados bimembres son el sujeto y
el predicado, y cada uno de ellos posee su propio núcleo. Al revisar con detalle
ambas estructuras podrá notarse que no todas las palabras que los componen
tienen la misma importancia.
Algunas de esas palabras son claves para la comprensión de lo que
quiere expresarse. Por esa razón se les considera el núcleo, bien sea del sujeto
o bien sea del predicado. Y en ambos, todo aquello que no forma parte del
núcleo son los llamados modificadores.
En el siguiente ejemplo se ilustra con claridad lo que expone esa
definición:
La casa de mis padres es muy grande.
En esa oración el sujeto es: La casa de mis padres.
El núcleo del sujeto: casa.
Los modificadores del núcleo del sujeto: la, de mis padres.
El predicado de esa oración bimembre: es muy grande.
El núcleo del predicado: es.
Los modificadores del predicado: muy grande.
Una vez aclarado con este ejemplo cuáles son las estructuras o
sintagmas que conforman a los enunciados bimembres, es importante saber los
elementos que se hallan presentes en cada uno de ellos.
El núcleo del sujeto
siempre es un elemento nominal, el cual puede ser un:
Pronombre. Ejemplo: Él
juega bien al fútbol.
Nombre propio. Ejemplo: María
llegó tarde.
Sustantivo común, Ejemplo: La casa
está sola.
Construcción sustantiva. Ejemplo: Su manera de pensar es un poco rara.
Los modificadores del sujeto son todas aquellas palabras que
complementan o especifican la acción o información del sujeto, y pueden ser:
Modificadores indirectos o construcciones adjetivales que son
antecedidas por una preposición. Ejemplo: Los padres de mi esposa viven en Madrid.
Modificadores directos o pronombres, artículos o adjetivos que
describen o caracterizan el núcleo del sujeto o nominal. Ejemplo: Sus últimas vacaciones fueron en
diciembre del año pasado.
Modificador por aposición. Consiste en una aclaratoria que se puede
intercambiar con el mismo núcleo, por lo general va entre comas. Ejemplo:
Miguel, el padre de Raquel, es
ingeniero.
En cuanto al predicado se refiere, su núcleo puede ser:
- Predicado
verbal porque está compuesto por un verbo. - Predicado
nominal o no verbal que podría ser un adverbio, un adjetivo o un sustantivo y
en lugar del verbo estaría una coma. Ejemplo: El país, en paz. La palabra paz
sería el núcleo nominal.
El verbo en toda oración puede o no ser modificado por algunas
estructuras que amplían o modifican su información. Dichas estructuras son:
- Objeto
directo o el que recibe la acción directa del verbo. Ejemplo: Pedro juega una nueva partida de dominó. - Objeto
indirecto o destinatario de la acción del verbo precedido por la preposición a
o para. Ejemplo: Pedro apuesta a su
mejor amigo. - Circunstancial
o que informa sobre las circunstancias en que se da la acción. Ejemplo: Pedro
juega muy bien al dominó. - Que
complementa al agente y es el que se halla en las oraciones de voz pasiva y va
precedido de la preposición por. Ejemplo: El último gol fue anotado por Pedro. - De
régimen o en los casos en que el verbo de la oración impone el uso de una
preposición como en tratar de, contar con, depender de. - Predicativo
porque es un verbo atributivo o copulativo el núcleo del predicado y enlaza o expone
un atributo. Ejemplo: Raúl es médico.
Tipos de enunciados y la
comprensión lectora
Comprender desde un principio las diferencias entre los enunciados unimembres
y bimembres es abrirse paso hacia una comprensión lectora más eficiente. Y debido
a esto es probable que se mejore mucho más la redacción personal, si acaso hay
interés en ello.
Pero no debe confundirse comprensión lectora con competencia lectora.
En todo caso pueden llegar a ser partes de un mismo proceso, según las
habilidades y fortalezas de cada persona en sus actividades cotidianas.
La competencia lectora es
la capacidad o el desarrollo de la habilidad para utilizar la comprensión
lectora en el contexto social o en el contexto laboral, en términos más
reducidos.
Y es esa una destreza o cualidad que suele desarrollarse mejor cuando
se comprenden las bases del idioma, como lo son elementos que conforman los enunciados.
Conocerlos y comprenderlos en todos sus aspectos es lo que facilita en etapas
más avanzadas de aprendizaje un éxito seguro.
No hay edad limitante para el desarrollo de esas capacidades y mucho
menos para el conocimiento y comprensión de las bases del lenguaje oral y
escrito. De hecho, al ya tenerlas en cuenta, se puede pasar de enunciados
bimembres sencillos a la elaboración de estructuras más complejas.
Esas estructuras más complejas siempre estarán basadas en enunciados
bimembres, pero con un mayor grado de dependencia e interrelación entre unas y
otras para una coherente elaboración del discurso. Y ese discurso puede ser en
el ámbito de cualquier actividad o en el terreno de la ficción.
Tanto la comprensión lectora como la competencia lectora son hoy
herramientas fundamentales en todo el espectro de las actividades humanas. Y
hoy más que nunca, tenemos a disposición de todo el mundo que lo necesite,
muchos sitios web que ofrecen información muy valiosa al respecto.
De manera, que hay muy poco margen de excusas para quien o quienes, de
verdad estén interesados en mejorar sus competencias lingüísticas. Abundan las
páginas especializadas, tanto de instituciones educativas, como personales que
tratan una gran variedad de temas relacionados con el aprendizaje y buen uso
del idioma.
Si el punto es mejorar la redacción personal, puede comenzarse por la
redacción de enunciados bimembres sencillas e ir de manera progresiva
aumentando el nivel de complejidad de los enunciados. Puede partirse de las que
aquí se han presentado en 30 ejemplos.
De ahí en adelante, como en la práctica de un deporte, es cuestión de
disciplina y entrenamiento el mejorar las diferentes competencias y capacidades
en la comprensión y el uso del idioma.